No hay supervivientes en la catástrofe del avión del presidente polaco

Ninguno de los pasajeros del avión del presidente de Polonia, Lech Kaczynski, que se estrelló cerca de la ciudad rusa de Smolensk, ha sobrevivido, aseguró el gobernador de la región de Smolensk, Serguéi Antufiev, a la agencia rusa Interfax

"El avión se preparaba a aterrizar, pero no llegó hasta la pista. Según la versión preliminar, el aparato aéreo se enganchó de los árboles, se cayó y quedó destruido. En la catástrofe no hay supervivientes", dijo el gobernador a la agencia Interfax.

La Fiscalía rusa informó de que a bordo del avión presidencial polaco había 132 personas, entre ellas Kaczynski y su esposa, si bien el ministerio de Situaciones de Emergencia cifró en 87 las víctimas.

El accidente se produjo en medio de una densa niebla cerca de la localidad de después de que el piloto rechazara la sugerencia de desviar el vuelo hasta Moscú o Minsk, la capital de Bielorrusia, según el Comité de Investigación de la Fiscalía.

El mandatario polaco se dirigía a la localidad rusa de Katyn, cerca de la frontera con Bielorrusia, para rendir homenaje a los miles de oficiales polacos ejecutados en 1940 por los servicios secretos soviéticos.

Junto a Kaczynski viajaban numerosos altos funcionarios polacos y familiares de las víctimas de la matanza de Katyn.

El presidente ruso, Dmitri Medvédev, fue informado de la catástrofe y envió a Smolensk al ministro de Situaciones de Emergencia, Serguei Soigu, mientras el jefe del Gobierno, Vladímir Putin, encabezará una comisión que investigará este accidente aéreo.

AVIONES TU, UN LUSTRO DE SINIESTROS. Las aeronaves Túpolev Tu-154 han protagonizado en los últimos cinco años varios desastres aéreos. RT recoge algunas de las más importantes.

El 4 de julio de 2001 se estrelló cerca de la ciudad de Irkutsk, en Siberia Oriental, el avión comercial Tu-154 de la aerolínea Vladivostok-Avia, que había partido de Ekaterimburgo con destino a Vladivostok. La catástrofe tuvo lugar mientras el avión estaba aterrizando para reabastecerse de combustible. Perecieron todas las personas que iban a bordo, 136 pasajeros y 9 tripulantes.

El 4 de octubre de 2001 se estrelló en el Mar Negro un Tu-154 de la aerolínea Sibir. Se encontraban a bordo del vuelo Tel-Aviv-Novosibirsk 51 ciudadanos de Israel, 15 pasajeros rusos y 12 tripulantes. El avión fue derribado por error con un misil de las fuerzas de defensa aérea ucranianas que estaban realizando un ejercicio en Crimea.

El 2 de julio de 2002 perecieron 71 personas en Alemania en la colisión de un Tu-154 ruso de las Aerolíneas de Bashkiria y un Boeing 757 de carga, de la empresa DHL. A borde del vuelo del Tu-154 Moscú-Barcelona había 69 personas, 52 de ellas alumnos de un colegio, y 11 tripulantes. En el Boeing 757 había dos pilotos. Fueron sentenciados cuatro gerentes del controlador aéreo suizo Skyguide.

El 24 de agosto de 2004 cayó en la región de Rostov-del-Don, en el sur de Rusia, un Tu-154 de la aerolínea Sibir después de que una terrorista suicida de origen checheno detonara un explosivo. El avión estaba volando de Moscú a Sochi. Murieron 90 personas. Casi simultáneamente otra terrorista suicida, también de origen checheno, activó el explosivo en el vuelo Tu-134 Moscú-Volgogrado, con 34 pasajeros y 9 tripulantes a bordo.

El 22 de agosto de 2006 se estrelló en Ucrania, en la región de Donetsk, un vuelo Tu-154M de Pulkovskie Avialínii, que volaba de Anapa a San Petersburgo con 160 pasarejos, entre ellos 49 niños, y 10 tripulantes. Perecieron todos.

La construcción del avión de pasajeros de medio alcance Tu-154 empezó en 1963 en la empresa Túpolev. El avión reemplazó a los Tu-104, Il-18 y An-10. El primer avión de prueba despegó en octubre de 1968 y al cabo de cuatro años entró en servicio. La velocidad máxima es de 880 km/h, su alcance es de 5.600 km, la altitud máxima es de 12.000 metros y el peso máximo de despegue es de 100 toneladas. El Tu-154 tiene una capacidad de 180 pasajeros. En total han sido construidas más de 900 unidades de Tu-154 de varias clases. La producción de los Tu-154 finalizó en 2006.

Moscú descarta fallas técnicas y reiteran que el piloto tuvo la culpa. Las autoridades rusas descartaron ayer que el accidente aéreo en el que el sábado murieron el presidente de Polonia, Lech Kaczynski, y más de una veintena de altos cargos y políticos polacos, lo provocara una falla técnica en el avión, y apuntan a un error del piloto.

“El piloto fue advertido sobre las condiciones meteorológicas adversas [niebla espesa], pero decidió efectuar el aterrizaje”, afirmó el jefe del Comité de Investigación de la Fiscalía, Alexandr Bastrikin, reafirmado la denuncia tras ocurrir el desastre de que el piloto desobedeció primero la sugerencia de la torre de control de desviar el vuelo a otro aeropuerto y luego la orden directa de suspender el peligroso aterrizaje.

La Fiscalía informó al primer ministro ruso, Vladimir Putin, de que un primer estudio de las conversaciones entre la tripulación del avión siniestrado y la torre de control demostraba que la nave, un Túpolev-154 de fabricación rusa, no había sufrido ninguna falla.

La empresa aeronáutica rusa Aviakor informó a su vez de que la nave del mandatario polaco había pasado una “revisión capital” en sus talleres entre mayo y diciembre del año pasado Su director, Alexei Gusev, dijo que el avión había acumulado 5,004 horas de vuelo y 1,823 aterrizajes, cantidades irrelevantes en un Túpolev-154 —diseñado para un plazo de vida útil muy largo—, aunque poco frecuentes para un avión presidencial.