Un reluciente primer B787 para United sale del hangar
La primera compañía aérea norteamericana pasó un pedido de 150 aviones monopasillo 737, la familia más popular de Boeing, por un valor total de US$14.700 millones a precio de catálogo. En total, Boeing registró pedidos o compromisos por un total de 396 aviones en una semana, por un total de US$37.000 millones, anunció al final de la feria de Farnborough, cerca de Londres.
Boeing recibió 175 pedidos firmes de su 737 MAX, una versión remotorizada que saldrá en 2017, dos años después de su rival europeo A320neo. El estadounidense reduce así, con un total de 649 pedidos hasta la fecha, distancias con el A320neo, que acumula 1.439.
Para el analista independiente Saj Ahmad, “Boeing no sólo recuperó terreno frente al A320neo, sino que avisa a Airbus que habrá más pedidos de 737MAX a medida de que confirme los compromisos que se aseguró esta semana”.
Y si el bloc de pedidos no se llena más rápidamente es porque todas las especificidades del 737 MAX no están todavía decididas y las discusiones para responder a las necesidades de los clientes continúan, según explicó Jeff Knitell, director de la actividad de leasing de la empresa estadounidense CIT.
En el último día reservado a los profesionales, el director comercial de Airbus, John Leahy, anunció consecutivamente cuatro acuerdos que llevan el valor de sus pedidos y compromisos en la feria US$16.900 millones.
“Estamos satisfechos del balance de la feria”, declaró John Leahy, quien prometió otros contratos “tal vez en unas semanas”.
En total, los acuerdos firmes y por confirmar, en su mayoría a empresas de leasing, son de 115 aviones de tres familias diferentes: el de medio recorrido A320, el de largo A330 y el futuro A350, también de largo alcance.
Y del valor estimado global de US$16.900 millones a precio de catálogo, 11.100 son pedidos firmes de 54 aparatos. Los resultados de Airbus quedaron un poco eclipsados por el anuncio de un posible retraso en la entrega del A350 y la ausencia de pedidos para el A380.
Airbus prevé vender 30 de estos superjumbos este año, aunque hasta ahora sólo anunció cuatro pedidos. “El mercado se ha frenado un poco pero nuestro objetivo se mantiene sin cambios y creo que tenemos buenas posibilidades de alcanzarlo”, dijo Leahy.
El consejero delegado de Airbus, Fabrice Bregier, subrayó por su parte que el programa A350 tiene que evolucionar sin prisas para evitar repetir los errores del pasado, como durante el desarrollo del programa A380, que tuvo más de tres años de retraso.
Explicó que Airbus trabajaba en estrecha colaboración con los subcontratistas y estimó que el programa, cuyas dificultades eran “conocidas”, estaba bajo control. Pero no descartó que la fecha de entrega prevista para el final del primer semestre de 2014 se rebase.